En este artículo respondemos a algunas dudas sobre cómo declarar los cobros derivados del ERTE en tu declaración de la renta.
ERTE ha sido durante 2020 una de las palabras más buscadas, ya sea por tener trabajadores y haber tenido que solicitarlo o por trabajar como empleado y haber sido incluido en uno.
Una vez realizados los trámites necesarios para el cobro, la cosa parecía quedar ahí, hasta ahora. Ya ha comenzado el plazo para presentar la Declaración de la Renta de 2020 y seguro que tienes dudas si has cobrado un ERTE.
En este post vamos a responder a las siguientes consultas:
Vamos con ello…
¡Claro! En la declaración de la renta hay que declarar todos los ingresos que hayas recibido durante el año, provengan de donde provengan. De hecho, al ver el borrador, verás que ya está incluida la prestación en tus datos fiscales.
Aunque sea una prestación que proviene del SEPE se le considera como un rendimiento del trabajo y tributará como tal en la declaración de la renta (exactamente igual que el resto de rendimientos del trabajo que has generado al trabajar como empleado).
Dependerá de tus ingresos pero recuerda que ahora tendrás más de un pagador, pues el SEPE sería un pagador más. Los límites al tener más de un pagador son más bajos.
Te recuerdo los datos para que puedas ir haciendo números 😜
Si solo has tenido un pagador, no tienes obligación de presentar la renta (salvo que te salga a devolver, que tampoco es obligatorio, pero que por poco que sea es tu dinerito) siempre que tus ingresos estén por encima de 22.000€.
En cambio cuando tienes más de un pagador estás obligado a presentar declaración si has ingresado más de 14.000€, salvo que los pagos de todos los pagadores a partir del segundo no lleguen a los 1.500€.
Aunque es una creencia muy extendida no. Pagarás más si has ganado más o si ya te hubiera tocado pagar, pero al estar por debajo de los 22.000€ no presentabas la renta.
Debes tener en cuenta que es posible que los ingresos que hayas recibido del SEPE por el ERTE no tuvieran aplicada la correspondiente retención de IRPF. La retención de IRPF es un pequeño pago que hacemos cada mes en nuestra nómina por los ingresos que estamos obteniendo. Esos pagos se van acumulando hasta la declaración de la renta, en la cual se calcula el importe que tendrías que abonar y se le resta lo que ya has ido aportando mes a mes.
Si las retenciones se han hecho bien no debería salirte ni mucho a devolver ni mucho a pagar.
Si notas mucha variación en la renta, habla con recursos humanos en el caso de estar contratado. Si eres autónomo y empleado, habla con tu gestor también, pues es posible que se pueda hacer alguna cosa para evitar el pago de golpe en la renta.
Para la de 2020 ya no se podría hacer nada hasta la propia declaración porque el año fiscal finalizó el 31 de diciembre de 2020, pero para 2021 sí.
Si te ha salido a pagar la declaración de la renta y continúas en situación de ERTE revisa con tu departamento de recursos humanos tus retenciones de IRPF. Es posible que sea necesario subirlas un poquito y evitar así tributarlo todo de golpe en la declaración de la renta.
Revisa también las ventajas fiscales de tu Comunidad Autónoma por si se te pudiera aplicar alguna y comprueba bien los importes de las prestaciones que has recibido. Podrían no coincidir y que la tributación variara por ello.
Si no estás muy seguro de los importes, bonificaciones, novedades fiscales con motivo del Covid… no dudes en solicitar a un profesional que confeccione tu declaración de la renta. En algunos casos el ahorro puede ser muy importante 😊
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